jueves, 26 de enero de 2012

CARNÍVOROS VS VEGETARIANOS


CARNÍVOROS VS VEGETARIANOS

Respecto a esta discusión sobre los beneficios o no de comer carne, he tenido a bien dejar un comentario en un blog de la red. Aquí se los dejo para que puedan poner en tela de juicio mis criterios.

Hola amigos:

Me gustaría exponerles mi criterio al respecto de comer o no comer carne. Yo me inclino a pensar como enseñaba el maestro Jesús de Nazaret. Él decía: Busca el reino de Dios y su justicia, y las demás cosas serán dadas por añadidura. Creo que los seres humanos deberíamos preocuparnos más por el alma que anima a nuestro cuerpo, que por el cuerpo que alberga temporalmente al alma.

Creo que beberíamos analizar este asunto, desde el cuidado que le brindamos a nuestra Alma individual y también desde el cuidado que le brindamos al gran Alma colectiva que también somos.

Si algo debería servirnos de brújula en nuestro comportamiento, es la búsqueda de la felicidad. Todo debe darse por evolución y cuando somos infelices adoptando determinada actitud, sea esta la que sea, quiere decir que no estamos en condiciones de adoptarla y sostenerla. Seamos felices. El bien que puede hacerle a mi cuerpo no comer carne, si el no hacerlo, va a ser motivo de infelicidad para mí, entonces me estará haciendo más mal que bien, porque aunque esta limitación que me impongo, me haga bien a mi cuerpo, le hace mal a mi alma.

Como bien han apuntado aquí, Jesús dejó claro que lo que hace daño al ser humano no es lo que entra por su boca, pues esto va a la letrina, sino lo que sale de su boca, pues lo que sale de su boca, al corazón de los hombres va. Una frase ofensiva, puede quedarse en el alma de una persona para siempre, puede ser arrastrado el trauma incluso, más allá de una existencia física, mientras que el mal del cuerpo, terminará con la existencia del cuerpo mismo, así que estas cosas hay que tenerlas en cuenta.

La evolución espiritual del ser humano, no debe darse a saltos. Debemos aprender a subir la pirámide peldaño a peldaño. Quien ha decidido no comer carne, por compasión con la vida de los animales, debe haber aprendido antes la compasión por sus semejantes. Digo con esto, que quien siente compasión por la vida animal y ha decidido no comer carne, debería estar en contra de la discriminación racial y de género, debería estar en contra de la xenofobia, debería estar en contra de la desigual distribución de la riqueza en el planeta. Debería estar luchando porque no existan diferencias reales entre unos y otros, cosa que a estar alturas, como vivimos en sociedades asentadas sobre el trono del Dios Dinero, resultan imposibles.

No entiendo que alguien se estremezca ante la muerte de una gallina, y no se estremezca ante la explotación de unos seres humanos a manos de otros, o que no se estremezca ante la injusticia de las guerras, o que no decida luchar por el cierre de las fábricas de armamentos y por el fin de todas las guerras. Miremos el mundo, miremos la pirámide que nos llevará hasta Dios, y empecemos a ascender por el principio. Recuerden que no somos seres individuales, que somos un gran ser colectivo. Seguramente que antes de decidir hacerle bien al mundo dejando de comernos una gallina, podremos hacer bien al mundo de muchas otras maneras.

Creo, por otra parte, que más que centrarnos en carne sí o carne no, deberíamos preocuparnos por la vida de esos seres que terminan sacrificados. A mí modo de ver, el daño más grande que se le hace a un pollo o a un cerdo, no el sacrificarlo para ser comido, sino el modo de vida que le damos, el cual atrofia de manera importante su alma.

Alrededor del mundo, tenemos miles y miles de criaderos de todo tipo de animales destinados al consumo humano. Todas esas almas nacidas, criadas y sacrificadas en cautividad, son verdaderos zombis. Pensemos en un ser humano que es criado desde que nace, encerrado en una celda. Desde luego, esa persona terminará totalmente atrofiada. Pues bien, lo mismo sucede con los zombis que comemos en la mayoría de los países del mundo.

Es importante que tengamos en cuenta que hay una diferencia muy grande entre la relación alimenticia que establecen los animales en la selva por ejemplo, donde en su inmensa mayoría todos cumplen el doble papel de depredadores y depredados. En tales circunstancias, la matanza y la alimentación de unos a costa de los otros, ocurre de manera natural y en virtud de un equilibrio diseñado por Dios y por tanto, un equilibrio perfecto.

Antes que plantearnos el elevado escalón de decir NO A LA CARNE, pongamos el pie en este otro escalón más asequible y por tanto, más necesario ahora mismo, que es el de equilibrar las relaciones alimenticias entre nosotros, depredadores y nuestras víctimas. Porque seguramente un pollo, más que pedir no ser devorado, pedirá que le demos una existencia digna.

Hay perros polares, que por amor a su dueño, aceptan ser devorados, porque comprenden la necesidad de salvar la vida de sus amos. Aprendamos nosotros los humanos a ser víctimas a voluntad. Jesús lo fue al entregarse y aceptar por amor al mundo, su muerte en la cruz. Aprendamos de la última y gran lección del maestro Jesús de Nazaret. Pues una cosa es cuando otro te victimiza en contra de tu voluntad, y otra cosa muy distinta es cuando tú, por evolución espiritual, decides ser siempre el asesinado y nunca el asesino, el devorado, y nunca el devorador. Sólo alcanza la vida eterna el que está dispuesto a ser útil, incluso, a riesgo de su propia existencia material.

La palabra de orden es EQUILIBRIO. Vimos en armonía con la naturaleza. Comprendamos que el pollo y nosotros somos UNO, y sólo así nos será sencillo decidirnos por comer carne o no comerla. El camino de purificación hasta ser UNO con Dios, es largo, y en él nos dejaremos la vida porque sólo el que muere, puede vivir para siempre. Del mismo modo en que la raza humana devora y ha devorado a los animales, otros superiores a nosotros vendrán que nos devorarán. La raza humana sólo es un escalón en el proceso evolutivo, pero a DIOS no llegaremos humanos. Como todo en la vida, la raza humana significa progreso con respecto a los animales, pero significa atraso con respecto a los nuevos seres que parirá la evolución.

Sal a la calle ahora mismo, e invita a un pobre a comerse un pollo frito. Seguro que Dios te recompensará por haberlo hecho.

TADEO

15 comentarios:

fus dijo...

Soy agnòstico Tadeo, espero que no te importe, pero yo tambien ayudo a los demas con hechos reales y no con oraciones. Creo que cumplo tu mismo còdigo bajo otras creencias.

un fuerte saludo


fus

JOSÉ TADEO TÁPANES ZERQUERA dijo...

Hola Fus, muchas gracias por tu comentario. No me incomoda que seas agnóstico. Doy por sentado que todos tenemos un camino de crecimiento espiritual y a lo largo de él, y marcados por nuestras experiencias, que siempre son personales, pensamos de un modo o de otro en los diferentes momentos de nuestras vidas y a lo largo de nuestras diferentes encarnaciones. Yo también fui agnóstico en su día, así que te comprendo perfectamente. Serlo no te impide hacer el bien. Un abrazo
Tadeo

Adriana Delgado dijo...

Hola Tadeo soy Adriana, he descubierto tu blog por casualidad, debo admitir que ando enganchada y deseo leerlo completo, desde hace unos pocos años me he planteado tantas preguntas sin respuestas, considero que soy una persona espiritual y tu has logrado con tus textos aclarar muchas de esas interrogantes. Sigue como vas un fuerte abrazo desde Venezuela.

Adriana Delgado dijo...

hola tadeo me gustaria que hablaras un poco acerca de ¿Cual es la razón de ser de la fealdad, desde el punto de vista de la justicia divina?
Hay quienes creemos en la justicia universal, en que a cada quien le es dado lo que merece, ¿Desde ese punto de vista, como se explica que el don de la belleza se de en forma tan desigual a unos y a otros?

No es que le de a la belleza física más importancia de la que merece. Todo, o casi todo, tiene su belleza, solo que no todos pueden verla. En cuanto a las personas, la mayoría estamos en el medio y no somos ni portentos ni esperpentos... Pero hay extremos chocantes, hay personas capaces de hipnotizar con su belleza, mientras que otras, espantan... y no me digan eso de que la belleza física es inferior a la espiritual, porque ser físicamente atractivo no es obstáculo para tener un alto grado de espiritualidad...

Anónimo dijo...

Hola amigo, hoy dediqué la tarde a leerte y a escucharte, un placer como siempre pasar por tus blogs. Bueno, al leer este comentario me vino a la cabeza una peli que se llama Fast food nation, en ella se puede apreciar muy bien que la ambición de algunos no solo se sirve de los animales en una forma atroz, sino también de los seres humanos, o sea de sus semejantes; pienso además que el que no respeta o no tiene compasión de los seres vivos, no lo tendrá tampoco hacia el prójimo. Hay algo que me fijo cuando miro el jardín, el balcón o el interior de una casa, cómo tienen y tratan a sus mascotas y a sus plantas, eso me dice mucho del grado de conciencia de sus ocupantes y, siendo sincera, ésto me hizo recapacitar sobre mi conducta para con todo lo que me rodea, haciéndome cambiar muchas actitudes que antes no veía.
Por supuesto que cuando como carne pienso en como vivió y murió el ser vivo, pero también tengo presente a toda la gente que padece tantas injusticias a mi alrededor; sin embargo me siento bastante impotente al respecto, sólo me queda tratar de remediar mis errores y trabajar por el bien a diario.
Un abrazo desde Bs. As.
Io.

JOSÉ TADEO TÁPANES ZERQUERA dijo...

Hola Adriana Delgado:
He decidido responderte en un nuevo post. Espero que lo llegues a leer. Besitos:
Tadeo

JOSÉ TADEO TÁPANES ZERQUERA dijo...

Querida Anónima bonaerense. Me dio mucho placer leer tu hermoso comentario. Comparto tus puntos de vista, y espero tenerte por aquí a menudo. Perdona que haya demorado tanto en venir por aquí. Besitos:
Tadeo

Isabel Magdala dijo...

Buenas tardes Tadeo, hacía tiempo que quería contestar a este post, hoy es el día para hacerlo a estas alturas que veo que tienes otros comentarios. Me alegra compartir tus criterios, todo se debe a una evolución y el hecho de que comamos carne, forma parte de dicha evolución. Incluso el trato que damos a los animales. A veces podemos ver a un gatito que tiene nuestro, vecino o un perro que tiene otro y un jardín seco y otro florido... Yo he visto personas, que han gastado mucho dinero por sus animales y a sus hijos darles una pobre educación. He visto en jardín seco, una persona con demasiados problemas para poder dedicar además atención a su jardín. Un jardín precioso, con una señora, que no me saludaba al pasar por delante de ella. Un perrito sucio, con una señora, con tres niños, sin más ayuda que la de sus propias manos. Pesonas que no comen carne y que se creen más espirituales que los demás y más generosos. Y personas que comen carne de zombis y que saben que la comen y saben lo que hacen, pero no dan importancia a ese hecho, pues todos somos carne de gusanos o cenizas del viento. No somos lo que comemos, somos aquello de lo que nos alimentamos. Isabel Magdala. Valencia

JOSÉ TADEO TÁPANES ZERQUERA dijo...

Gracias, Isabel Magdala por tus sabios comentarios, por tu hermosa manera de responder. Besitos:
Tadeo

Alice Leyva dijo...

Hola Tadeo me di una escapada a tu blog para conocerte pues tiempo atrás dejaste un comentario en el mio. Me gusta tu visión y a la ves me confunde puesto que según yo la diferencia entre los animales y los seres es que solo nosotros poseemos un alma. Los animales tienen una conciencia colectiva y según la metafisica al sacrificar a alguno debemos "orar" por la evolución de su especie. Me parece muy humanista tu opinión pero sobretodo digna de alguien con un respeto y fidelidad a sus creencias. Yo fuí vegetariana hace tiempo por cuestiones de salud y considero que en la actualidad los animales de los que llevabas nos alimentamos están saturados de hormonas de crecimiento y son alimentados con comidas procesadas que se ha roto el balance natural de la cadena alimenticia moderna por lo que deberiamos volver a nutrir la tierra y comer vegetales como lo hicieran nuestros antepasados antes de descubrir el fuego.

Alice Leyva dijo...

Hola Tadeo me di una escapada a tu blog para conocerte pues tiempo atrás dejaste un comentario en el mio. Me gusta tu visión y a la ves me confunde puesto que según yo la diferencia entre los animales y los seres es que solo nosotros poseemos un alma. Los animales tienen una conciencia colectiva y según la metafisica al sacrificar a alguno debemos "orar" por la evolución de su especie. Me parece muy humanista tu opinión pero sobretodo digna de alguien con un respeto y fidelidad a sus creencias. Yo fuí vegetariana hace tiempo por cuestiones de salud y considero que en la actualidad los animales de los que llevabas nos alimentamos están saturados de hormonas de crecimiento y son alimentados con comidas procesadas que se ha roto el balance natural de la cadena alimenticia moderna por lo que deberiamos volver a nutrir la tierra y comer vegetales como lo hicieran nuestros antepasados antes de descubrir el fuego.

rocio dijo...

hola tadeo, me quede impresionada con tu blog, escribis cosas muy buenas. llore con el de las almas gemelas al recordar que yo se quien es la mia ♥.
respecto a este post de carnivoros vs vegetarianos, es muy interesante todo lo que decis, y pienso de la misma manera, hace poco escuche de un lugar donde crian animales obviamente para comer, pero no los tienen encerrados ni nada, los hacen vivir felices, en su habitat, bien cuidados, hasta que cumplen una cierta edad y luego los matan, mas alla de que los maten al fin, es algo hermoso pensar que ese animal vivio una vida feliz, y no encerrado y triste. hace un tiempo soy vegetariana y estoy muy feliz con esto, xq hoy en dia valoro las cosas de otra manera, fue un cambio de alimentacion que al principio no costaba x la rutina y tiempo, pero ahora el cambio lo siento interiormente, no se si me explico.
bueno gracias por compartir todo esto, un saludo

rocio dijo...

** que al principio si costaba por la rutina y tiempo ** quise decir :)

JOSÉ TADEO TÁPANES ZERQUERA dijo...

Hola Alice Leiva:
Gracias por tus palabras. Estoy de acuerdo con todo lo que dices y me parece genial. Sí quería decirte algo y es respecto al alma grupal de los animales. Los animales inferiores como los gusanos, los caracoles, las hormigas y tal, tienen un alma grupal, pero los animales superiores no tienen un alma grupal. Un perro no la tiene, ni un gato, ni una vaca, ni un león. El alma de esos seres es más individual que grupal. De hecho, estos animales superiores tienen conciencia. Su cerebro no es como el nuestro, pero lo tienen.

JOSÉ TADEO TÁPANES ZERQUERA dijo...

Hola Rocio:
Tengo que leer lo que he escrito aquí, porque he dado pasos en mi vida camino al vegetarianismo. Ahora tengo otras ideas que me acercan más a esta forma de alimentarme. Es cierto que sigo comiendo carne, porque como lo que mi mujer me cocina, y para mí es un acto de amor, no despreciar lo que ella para mí prepara cuando yo estoy, por ejemplo, navegando por la red, pero cada vez como menos carne y he comprendido con una visión más preclara, que esto será el futuro de la humanidad.